La planta italiana de yeso aumenta su producción con una MOBICAT EVO

Italia es uno de los mayores productores de yeso de Europa, material abundante en el Piamonte, Sicilia y Las Marcas, así como en Emilia-Romaña. En la provincia de Bolonia, el yacimiento se concentra especialmente en la Vena del Gesso Romagnola, donde una cresta de yeso de 1,5 km de ancho se extiende a lo largo de unos 25 km. La Vena del Gesso Romagnola es, por tanto, una cresta de sulfato de calcio dihidratado (CaSO4x2H2O) de gran importancia, sobre todo porque es la única formación geológica de este tamaño en Europa que consiste exclusivamente en yeso.

La planta de Monte Tondo está situada en la provincia de Ravena, en el límite del parque natural de Vena del Gesso Romagnola. Al principio, la planta trabajó con los métodos y la logística disponibles en ese momento. Se excavaron túneles de los que se extraían directamente las materias primas. En la actualidad, las materias primas se extraen por el método de explotación a cielo abierto, en el que se forman pendientes y escalones mediante perforación y voladura. En 2005, Saint-Gobain adquirió British Plaster Board (BPB), propietaria de la planta de yeso desde finales de los ochenta. Hoy en día, la planta de Monte Tondo es una de las ocho plantas de Italia gestionadas por Gyproc Saint-Gobain, una división de la multinacional francesa y líder del mercado en sistemas de paneles de yeso y enlucidos y acabados de paredes a base de yeso. En Italia, Gyproc Saint-Gobain es una empresa establecida con sede en Milán y posee ocho plantas de yeso. La planta de Monte Tondo, que actualmente produce alrededor de 200 000 toneladas de yeso puro (grado de pureza > 90 %), abastece a la planta de paneles de yeso y enlucido de Casola Valsenio.

En junio de 2016, la planta de Monte Tondo añadió a su maquinaria una machacadora de mandíbulas Kleemann MOBICAT MC 110 Z EVO. La machacadora de mandíbulas es el primer producto de Kleemann adquirido por Gyproc Saint-Gobain Italia, y la adquisición representa un paso decisivo en el fomento de la productividad de la planta de yeso. Antes de la llegada de la nueva machacadora de mandíbulas, el ciclo de producción consistía en transportar el material dinamitado en un volquete hasta una resbaladera para alimentar una instalación de machaqueo primaria subterránea. El material se procesaba en una segunda etapa de trituración en una instalación de machaqueo secundaria y el producto final se cargaba en camiones que lo transportaban a la planta de producción. Aunque este sistema ha logrado excelentes resultados a lo largo de los años, ha sido difícil de mantener. Debido a la disminución de la demanda, la planta de producción compró menos material. Esta menor demanda se vio acompañada de un descenso en las ventas de materias primas a las fábricas de cemento, que utilizaban yeso para la producción de cemento Pórtland. Anteriormente, estas fábricas registraban picos de producción de 600 000 toneladas/año, hasta que el valor se estabilizó en 200 000 toneladas/año.

El cambio también fue el resultado de consideraciones logísticas y operativas, como señala Roberto Margutti, director técnico de minería de Gyproc Saint-Gobain: «La adquisición de la machacadora de mandíbulas móvil de Kleemann forma parte de un plan más amplio de optimización de la producción destinado, entre otras cosas, a mejorar aún más las condiciones de seguridad. Esencialmente, la machacadora de mandíbulas móvil permite que el proceso de trituración primaria se traslade al área donde se recoge el material después de la voladura. Allí, la

MC 110 Z EVO machaca el material dinamitado hasta un tamaño de 0-160 mm antes de transportarlo a la instalación de machaqueo secundaria subterránea». Aparte de eliminar la necesidad de que la MC 110 Z EVO utilice la instalación de machaqueo primaria estacionaria, también se optimizó el rendimiento del proceso de trituración secundaria: al dar a la instalación de machaqueo secundaria un producto intermedio más pequeño y uniforme, ahora puede producir más, a la vez que se reduce el mantenimiento. Por todo esto, la adquisición de la machacadora de mandíbulas Kleemann desempeñó un papel decisivo en la consecución de los objetivos de la dirección técnica.

Como todas las machacadoras de mandíbulas móviles de Kleemann, la MC 110 Z EVO ofrece una serie de ventajas. En la planta de Monte Tondo, produce hasta 210 toneladas/h triturando una materia prima con valores LA 27: una aplastabilidad del 50 % y una densidad aparente de 1,35 t/m3. Los bloques de sulfato de calcio se trituran de 0-500 mm a 0-160 mm. Este último es el tamaño ideal para el proceso de trituración secundaria, que ahora se beneficia de un flujo de producción perfeccionado. Por ejemplo, la precriba de cubierta doble independiente nivela el material en la tolva para asegurar un volumen de producción constante. La capacidad de producción mejora aún más gracias al sistema de alimentación continua (CFS). La machacadora de mandíbulas ofrece la ventaja de un bajo consumo de combustible gracias a su accionamiento diésel directo, a la vez que ofrece un rendimiento comparativamente alto en relación con su tamaño. El resultado es un sistema con un 30 % menos de consumo en comparación con las machacadoras de mandíbulas móviles equipadas con sistemas hidráulicos convencionales.

Según Silvano Sartor, director técnico de la planta de yeso, la machacadora de mandíbulas móvil tendrá un efecto positivo en la producción tanto ahora como en el futuro.