Estreno en Italia: la recicladora en frío y estabilizadora WR 250 de Wirtgen rehabilitando la autopista A4

La autopista A4, que pasa por Milán y Venecia, es la vía de conexión entre Turín y Trieste. Transcurre de oeste a este a través del norte de la península itálica y se extiende a lo largo de 522 km. La A4 consta en total de cinco segmentos: Turín-Milán, Milán-Brescia, Brescia-Padua, Padua-Venecia y Venecia-Trieste. De cada uno de estos segmentos se hace cargo un concesionario diferente. Por causa de su extensión a lo largo de la llanura Padana (una de las regiones más industrializadas y pobladas de Europa), la A4 es nada menos que la autopista más transitada de todo el continente. En torno a 115 millones de vehículos rodaron por esta travesía en 2013. El tráfico regional y nacional junto al transporte internacional suponen juntos un gran caudal de tráfico, pues la A4 es la conexión más rápida que conecta Portugal, España y Francia con Austria, Eslovenia y otros países europeos.

Como el resto de los concesionarios de las autopistas italianas, Autostrada Brescia-Verona-Vicenza-Padua SpA, se somete a la supervisión de la SVCA, la autoridad a la que compete las concesiones de los trabajos en las autopistas, uno de los departamentos del Ministerio de Infraestructura y Transporte. Por causa del denso tráfico (en 2013 se registraron 95,6 millones de vehículos tan sólo en el segmento que une Brescia con Padua), el concesionario examina intensamente la calzada y lleva a cabo sus medidas de mantenimiento en relación al estado en que ésta se encuentre realmente. De algunas medidas de mantenimiento (por ejemplo, el fresado y la mejora de la capa superficial de la autopista) se hace cargo directamente la Serenissima Costruzioni, el departamento operativo del concesionario responsable de planificación y medidas de mantenimiento. Demás medidas como, por ejemplo, el reciclado en frío de las capas profundas destinado al aumento de la capacidad portante, se conceden a empresas especializadas como, por ejemplo, a la compañía Ecovie, que emplea con éxito la estabilizadora-recicladora de Wirtgen.

Ecovie fue la primera empresa italiana que compró una nueva recicladora en frío WR 250 y también esta máquina fue la primera que se envió a Italia. La decisión se tomó después de que los técnicos de Ecovie realizaran una gran cantidad de exámenes en proyectos de estabilización o reciclado en frío con betún espumoso. Se sirvieron para ello de una recicladora WR 250, la máquina de Wirtgen que puso a disposición la sociedad de distribución y servicio italiana del grupo. La máquina muestra en todo su espectro una mayor capacidad de rendimiento en comparación con el modelo antecedente, WR 2500 S, que no sigue produciéndose si bien Ecovie y otras muchas empresas de todo el mundo lo siguen empleando con éxito en numerosos casos de aplicación. Para Ecovie la decisión a favor de WR 250 fue simplemente lógica: el reciclado en frío es un sector de aplicación en el que Wirtgen habitualmente cuenta con una considerable ventaja frente a la competencia en lo relativo a tecnología y productividad.

Hace poco Ecovie ha llevado a cabo una serie de medidas de mantenimiento en el segmento Brescia-Verona-Vicenza-Padua; allí, en dirección al este / Padua y a lo largo de varios emplazamientos de obra, se recicló en frío un total de 20 km del carril lento, o sea del carril que, por causa de fluido tráfico de camiones, se encuentra sometido al uso más intenso.

La primera obra comenzó a la salida hacia Sirmione y desde allí llegaba a unos dos kilómetros en dirección este. Después de retirar por fresado un grosor de 13 cm de las capas superiores, se reciclaron in situ otros 20 cm de capa subyacente. De este modo se pretendía alcanzar una capa total de 30 cm de material reciclado con betún espumoso; la profundidad de fresado se determinó en 13 cm ya que se contaba con un aumento de la altura del material tras el proceso de reciclado de 3 cm. Los análisis de la cubierta de la calzada existente determinaron el añadido de 2,9 % de asfalto y de 2,6 % de cemento a fin de obtener una mezcla ideal.

Con motivo de la realización de los trabajos se emplearon dos caravanas de reciclado que cubrieron los cuatro metros de ancho del carril. La WR 250 de la primera caravana procesó 2,4 metros, lo cual equivale al ancho total de la máquina misma, mientras que la segunda caravana, que constaba de una WR 2500 S, se hizo cargo del 1,6 m restante adaptándose así al ancho del carril. Este método ofrecía dos ventajas: por una parte se evitaba el que una sola máquina tuviera que dar dos pasadas para cubrir el ancho completo de la calzada, gracias a lo cual pudo cumplirse con la rigurosa planificación cronológica de Serenissima Costruzioni; por otra parte se emplearon así ambas recicladoras de un modo inmejorable.

El material reciclado con la WR 250 se compactó con un nuevo compactador vibratorio H 20i de Hamm, mientras que tras la WR 2500 S actuaba pre-compactando otro compactador vibratorio de Hamm, el 3520; ambos compactadores son de un peso de 28,48 toneladas. El material se alisó después con una niveladora y se sometió nuevamente al efecto de un compactador vibratorio. Finalmente un compactador neumático sobre ruedas GRW 280 se ocupó del sellado perfecto de la capa superficial. De este modo se puso a seguro que la capa de material reciclado aprobara tanto las pruebas de sometimiento a carga (con 1500 kg por metro cuadrado) como la prueba dinámica de precipitaciones de pesas (valores Ev2 de 100 MN por metro cuadrado).

Tras la conclusión de los trabajos de reciclado se aplicaron 8 cm de capa adhesiva y 4 cm de capa superficial permeable e insonorizante destinada a garantizar la adherencia y una buena visibilidad incluso en caso de intensas lluvias.

El director técnico Fabrizio Furlan resume sus impresiones de la nueva WR 250 con estas palabras: «considerábamos importante verificar la productividad de la WR 250 y pienso que las experiencias de otros usuario que se han servido con éxito de la WR 2500 S son comparables. Ya el anterior modelo era apreciado por su mítico rendimiento así como fiabilidad y a mi juicio esto mismo ha sido decisivo para que Wirtgen gozara de mayor fama como líder incuestionable en el mercado del sector tecnológico del reciclado en frío. La WR 250 es incluso mejor en lo tocante a productividad, consumo de combustible y calidad. Estos son los resultados que hemos obtenido tras realizar una serie de amplias comprobaciones y que precisamente nos han decidido a comprar la máquina. El nuevo modo constructivo de la WR 250 ofrece ventajas relativas al transporte ya que esta máquina no es tan alta. Gracias a la nueva configuración es posible un manejo mejor y una capacidad de maniobrar superior, especialmente al virar cerradamente para superar obstáculos. La cabina se ha mejorado también considerablemente. El maquinista opinó que los efectos del sistema de palanca de mano, de la interfaz gráfica del ordenador de a bordo, la comodidad en general y la climatización crean unas condiciones de trabajo positivas y mejoran la productividad».